¡Envío gratis a partir de 60€ de compra para Península Ibérica! Recíbelo en 24-72 hrs.

Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Un plato de jamón es una de esas cosas que nunca debe faltar en una ocasión especial, ya sea un aniversario, una celebración familiar o cualquier otro tipo de reunión. Emplatar correctamente este ingrediente es tan importante como elegirlo bien, por eso, si te preguntas cómo presentar un gran jamón, te contamos todo lo que necesitas saber para dejarlo bonito, desde cómo debe ser colocado hasta la temperatura a la que debe de estar antes de cortarlo.

plato de jamon colocado de forma concentrica

Conoce los trucos de cómo presentar un buen plato de jamón

Índice de contenidos

Por lo general, los profesionales sirven su producto estrella en un plato blanco, por lo que ningún elemento visual, como el patrón de la fuente, lo interferirá. Asimismo, el embutido, ya sea Jamón ibérico, Paletilla ibérica o jamón 100% ibérico de bellota se debe colocar en el plato en forma circular, de afuera hacia adentro.

Cortar jamón

Lo primero que se debe tener en cuenta es el grosor y la longitud de la rebanada. Aunque compres el mejor jamón del mundo, si no lo cortas bien, no podrás disfrutar de todos sus sabores. La costumbre hace que asociemos la idea de comer jamón con la imagen de una pierna o una paleta, pero debemos recordar que si no sabemos cortarlos podemos estropearlos. Aprender a cortar jamón se puede hacer a través de clases de corte, pero si no tienes tiempo, puedes comprar jamón ya cortado.

En este sentido, hay que tener en cuenta que en nuestra tienda online disponemos tanto de piernas enteras como de jamones loncheados, e incluso si lo deseas, puedes elegir la pierna y te la preparamos. Las ventajas que obtienes son muchas, por un lado quieres asegurarte de que el jamón no se reseque, ya que el envasado al vacío lo conserva mejor, y por otro lado, también sabes que cada parte del jamón tiene el espesor exacto.

Respecto a la grasa, hay mucha gente a la que no le gusta el tocino, pero juega un papel importante en la conservación del jamón. Además de ralentizar el proceso de secado.

Y de la oxidación de la carne, el tocino protege este alimento al evitar que se exponga a la temperatura o la humedad. Entonces, es mejor servir primero la carne y la grasa, mejor aún si él quiere que le sirva los dos.

Temperatura del jamón

Un tercer aspecto a tener en cuenta es la temperatura, tanto del plato como del propio jamón. Lo que importa es que la cura sea la adecuada, por ejemplo, si tus piernas están en la cocina, el ambiente es seco y la temperatura entre 23ºC y 25ºC es conveniente. Si decides comprar jamón loncheado, debes saber que no es necesario guardarlo en el frigorífico, siempre que esté seco, basta con guardarlo en el trastero. Las rebanadas tampoco tienen que abrirse y comerse inmediatamente, sino esperar unos minutos. Sabrás que las rebanadas están en su posición exacta cuando se separen naturalmente unas de otras.

En cuanto a la temperatura del plato, hay quien piensa que lo mejor es meterlo en el frigorífico y dejarlo enfriar antes de ponerle el jamón encima, pero este proceso es contraproducente. Colocar un plato a temperatura ambiente ayudará a que las rebanadas se separen mejor entre sí.

Llegados a este punto hemos visto todos los detalles que hay que tener en cuenta para saber cómo presentar un buen plato de jamón, pero ¿se sirve solo? por supuesto no.

¿Con que acompañar un plato de jamón?

Tienes dos soluciones, la primera es el pan y la segunda picos. Si decides servir el jamón con pan, no olvides remojarlo con un poco de tomate rallado o aceite de oliva. Compra el pan del día, tomates naturales de hortalizas cercanas y utiliza los mejores aceites vírgenes extra. ¡El jamón solo se puede servir con ingredientes de primera!

En cuanto a los picos, tienen un sabor neutro y son estupendos para degustar otro tipo de embutidos o incluso queso además del jamón. Al comer uno de estos palitos, tu sentido del gusto recupera su sensibilidad original, solo entonces puedes disfrutar del sabor original del siguiente bocado. ¡Definitivamente notarás todos los matices! ¿Qué estás esperando? ¡Disfruta del adobo y cuida cada detalle, que es el auténtico manjar!